Hace un año surgió en la blogósfera un blog pitero, hecho casi en su totalidad por gente snob, que se siente la quintaesencia de la cultura y el conocimiento, con el poder de criticar a quienes no piensan como ellos. Casi todos los participantes se dedican a quejarse de que los mexicanos no leen y a presumir cómo a ellos les ensartaron el hábito de la lectura con la leche materna, lo que explica que sean tan mamones. Las consecuencias a la vista: El blog murió de inanición. La excepción de entre tanta fauna pedante, petulante y petumamona la brinda este post, que aterriza la situación y muestra cómo el mexicano sí lee, el pedo está en sus lecturas. Pues resulta que, con ese pensamiento en mente, la Tabernera Mítica y el Bizcocho de Montecristo se fueron a meter a un pinche agujero en aras de una causa noble: El rescate de libros en el Auditorio Nacional.
Mucho se ha comentado de las espectativas rebasadas, que la campaña por el rescate resultó un éxito y la chingada y media. Y en ese sentido no se equivocan, pues el espacio destinado a tal efecto se encontraba hasta la madre de gente.
Por todos lados se oían comentarios del tipo compré 3 diccionarios por 10 pesos y arrebatándose los libros de las manos, cual vil barata de calzones en departamento de damas y ni el metro ofrece tantas trabas al transitar.
En aquel post del que les platico comenté, entre otras cosas lo siguiente:
Personalmente creo que es falso que el mexicano no lee, lo hace y un ch...; incluso sabemos que cada año existe en el Palacio de Minería (Cd. de México) la "Feria Internacional del libro", que es como La Meca para los islámicos o el Museo de Antropología para los niños mexicanos: Todos hemos ido por lo menos una vez en la vida. Y si son un tanto observadores, verán que siempre está atestada (¿o atascada?) de gente... y gente que sí compra libros. El problema no es que lea...
... el problema es lo que lee. Y no me causa sorpresa ni me angustia si el mexicano promedio no conoce los "clásicos" (algunos de ellos francamente sobrevaluados), ni tampoco creo en alguna lista básica de títulos que alguien debiera conocer "por pura cultura general" (como quiera que entendamos ese término); la bronca en mi opinión es, como dije antes, lo que sí se lee.
Por mencionar algunos autores, todos ellos excecrables:
- Carlos Cuauhtemoc Sanchez.
- Paulo Coelho.
- Enrique Krauze.
- Dan Brown (ejem... )
O algunos títulos:
- Las siete bio-rutas.
- Feng-shui para escépticos.
- Cómo conquistar a las mujeres.
- El Código da Vinci (otro ejem... )
- Y un largo etcétera.
Y me cae que no invento ninguno.
Y si alguien lo duda cheque lo siguiente. Pues mientras a los libros publicados por la UNAM ni quien los pele
Toda la gente se amontonaba sobre los clásicos autores, que son los que sí venden:
Y los que, sin importar quien los escriba, serán un éxito de venta siempre que lleven esos títulos:
De lo que se entera uno: Estos 2 que salen en primer plano eran el coordinador de la Lic. en Historia (der.) y su secretario... e iban solitos. Dejo las conclusiones al lector porque yo no me atrevo
Sin embargo no estuvo tan mal, en vista de que encontramos cosas verdaderamente interesantes:
Sidurti es fan de la saga del Capitán Alatriste y yo le tenía el ojo a ese libro de la guadalupana desde hace 5 años. Además venía con nosotros el querido y nunca bien ponderado Señor patito.
Pues los 3 salimos de ahí hartos, hastiados y hasta la madre y, para calmarnos un poco, llevamos al pato a Chapultepec.
Y en un Oxxo nos encontramos unas botellitas de Licor Boones, que degustamos con los siguientes resultados:
Volviendo a lo de los libros creo que para rematar el post terminaré por citarme a mí mismo en aquel comentario a aquel otro post:
...cuando uno empieza a leer es obligado. Lo malo es que parece que sólo así podemos adentrarnos en ese mundo: a huevo. Y si no tiene letras grandes o fotos valió gorro, no nos interesa.
¿Soluciones? Quien sabe. Ya habrá alguna.
Queda de ustedes:
TORK: Bizcocho de Montecristo. Año 2008 E.C. - 9 E.E.