De razones y sinrazones: Ya marché

... Y no precísamente al otro mundo.

Ayer por fin se llevó a cabo la famosa Marcha Mundial Por el Orgullo Ateo (repítanlo 3 veces y se les aparece Marge la Loca). Me voy a saltar la crónica y el anecdotario (y miren que con eso tengo para una entrada larguíiisima, hay mucho que contar) y voy a concentrarme en una crítica hacia lo que ha resultado este movimiento. Antes de ello quiero hacer un par de acotaciones: Mucha gente cree que ser crítico es ser criticón, eso es falso; ser crítico implica reconocer todo lo bueno y lo malo de aquello a lo que se critica. Por otra parte, se critica aquello en lo que se cree; cuando yo tiro mierda contra la iglesia, dios, las mujeres exitosas o lo que he venido diciendo por años, es sólo eso: tirar mierda.

No los critico porque no creo en ellos, ni espero que cambien porque no está en su naturaleza. Con el movimiento ateo que se está formando la cosa cambia. Estoy de acuerdo con su causa, ya que me parece justísima y lo que digo es sólo con el fin de que pueda mejorarse (y además aguantan vara).

Aclarado lo anterior voy. Pude haberlo escrito ayer mismo pero aún llevaba la emoción del momento. Mejor ahora que ya tengo la cabeza fría:

Lo bueno

Marchamos alrededor de 50 personas (para las 10 o 12 que yo esperaba), pero mucha gente se enteró de que estamos ahí y no somos leyenda urbana. Por el contrario, vimos como el número de ateos es grande, las experiencias muy similares y las emociones casi las mismas.
Se congregaron personas que, en otras circunstancias, en la puta vida se hablarían ¿o se imaginan a un historiador al que no le gusta el futbol cotorrear con un ingeniero americanista?
Se han establecido los cimientos para la conformación de una comunidad atea que, según las estadísticas es pequeña (urge que se difunda la información sobre el trámite de excomunión voluntaria o apostasía), pero que en la realidad es muy numerosa y va en aumento.
Se demostró que el ateismo como tal no es enemigo de las religiones (aunque algunos cabrones como yo sí), que como grupo sólo buscamos que se cumpla eso de la libertad de cultos (los incultos que se chinguen), conformarnos en una comunidad que para nada significa ser una iglesia atea y no ser forzados a creer (que nunca fue mi caso, pero sí lo es para muchos).

Lo malo

No (y enfatizo: NO) apoyo ni estoy de acuerdo con 2 términos: Marchar y exigir. Y no estoy hablando a toro pasado, lo dije en su momento y después lo volví a decir. La marcha nunca ha sido ni será el camino para lograr la victoria. La marcha sólo sirve para crear conciencia de un problema donde no la hay, pero ni de lejos es una medida de acción efectiva, ni va a cambiar nada. Contínuamente escuché las palabras: en la marcha del año próximo... Honestamente espero que tal marcha no ocurra. Aunque nuestras propias expectativas se rebasaron, e independientemente del número de gente que haya ido, la marcha sólo será efectiva en un sistema de gobierno aliado a la gente. Una clase de gobierno que actualmente no existe.
¿Exigir? Por mucho que, legalmente, el laicismo esté establecido, no la vamos a conseguir exigiendo. Las organizaciones obreras, campesinas, estudiantiles, etc. han exigido por décadas y sólo les han pintado el dedo. El hecho de que a nosotros nos hayan dado un papel sellado dándonos permiso de hacer argüende no significa que al gobierno le importe un carajo que los ateos les exijan laicismo. Simplemente, a la manera de Salinas: "Ni los veo, ni los oigo". Al enemigo no se le exige, se le vence.
La pretensión mundial. El hecho de que se pretendiera hacer esto a lo grande ya era estar de antemano vencido (y esto también ya lo había dicho). Siempre hay que pensar en micro antes de pensar en macro.
La presencia medíatica. La prensa es parte del sistema. Lo vemos diario con las noticias en tv, la radio y los periódicos. El hecho de que anduvieran haciendo entrevistas y que difundan la marcha y el movimiento es un gran desprestigio para nosotros, le quita seriedad a nuestras causas. Personalmente me sentiré aliviado si no se publica nada al respecto. Que circule donde tiene que circular.
El riesgo, siempre presente, de la conformación de una ecclesia atea, con postulados, reglas, normas y restricciones. Aunque en el acontecimiento de ayer se dejó bien claro que no es ese el objetivo, en el caso de que se conformen los grupos, foros y organizaciones en general, la tentación de poder es grande y siempre estará el riesgo. Les pasó a los xtianos, les puede pasar a los ateos.