Sabemos que los términos ideas, creencias y opiniones son diferentes entre sí, pero para efectos de esta entrada voy a englobar las 3 dentro del término ideas, con el fin de no estar especificando cada rato, a menos que el marco del texto lo requiera.
El tema de esta entrada es tan trilladísimo en la comunidad bloguera que yo ya me había tardado en escribir al respecto: ¿Tenemos que respetar las ideas de los demás? ¿Las ideas por sí solas merecen respeto?
Para empezar el tema lo han tratado de forma breve, concisa y chingona Fernando Savater y Jaime Nubiola. En opinión de ellos las ideas por sí solas no merecen respeto. El respeto es hacia la persona.
Y en mi opinión ni siquiera eso. El respeto se gana con acciones. No es algo que vaya implícito o incluido en el paquete que cada ser humano trae (si es que existe tal paquete) cuando sale del viscoso agujero de su madre y empieza su vida en este mísero planetita. Ya no valen los pendejísimos y consabidos...
- Respeta a tus mayores
- Porque soy tu padre/madre (¡la madre que!)
- ¿No ves que la gente se ofende?
- ¿Cómo vas a respetar a una persona si no respetas sus ideas?
- Aunque tengas razón no tienes derecho a meterte con las creencias de los demás. Remarco éste porque me lo soltaron hace rato. Normalmente me río y tildo de idiota a quien dice eso, pero dado que quien me lo dijo es alguien cercano y muy querido, en vez de reirme, hice un puto coraje que sigo masticando.
Esta última aseveración es la que voy a patear, putear, despedazar, escupir, mear, cagar y todo lo demás. Es una obra maestra de la estupidez, el miedo y la intolerancia.
Las bases que nos hacen tener derecho a meternos con las ideas de la gente son las siguientes:
- Libertad de expresión.
- Conocimiento
El respeto hacia la persona, ya que se lo ganó, implica el reconocimiento de su derecho a existir y su derecho de opinar lo que le de su chingada gana. La intolerancia no es, como opinan los ignorantes, el burlarse o meterse con las ideas de los demás; la intolerancia es negar ese derecho a existir, a creer o a no creer. Intolerante es el que no permite que sus ideas sean puestas a prueba o sometidas a la crítica. El aceptar todas las ideas de forma acrítica sólo crea fundamentalismos y es indigno de aquellos que se claman seres humanos.
Cierro con lo que le dije a un idiota hace un par de años con respecto a este tema:
... considero idiota a aquel que se ofende con la refutación o el derribo de sus ideas. Si tú te ofendes con eso no puedo hacer nada. Y, complementando lo anterior y para que quede claro, respetaré las opiniones sustentadas y con un genuino interés por compartir. Si tus opiniones llegan a eso, las respetaré, si no, no te sorprendas. Y verás que no seré el único con ese criterio.
O lo que es lo mismo: Si quieren que respete sus opiniones no sean idiotas.
Actualización: Antonio comenta de forma excelente el siguiente revire que me voy a fusilar impunemente: "Supón que yo creo que tú eres un pendejo. Es mi idea y la tienes que respetar". A ver respeten eso idiotas
Queda de ustedes:
TORK. Bizcocho de Montecristo. Año 2009 E.C. - 10 E.E.