sábado, 11 de septiembre de 2010

Skeptrónica

Hola gente:

Como quizá ya sepan he andado metido en otros proyectos y en medio de un desmadre que ya no voy a abordar porque sé que ya los tengo hasta la madre. Ahorita les platico de uno en el que estoy junto con otras personas: El proyecto Skeptrónica.

Para no hacerlo muy largo les pongo aquí el texto de presentación que escribí para el sitio principal:

Hola a todos.

Skeptrónica es un proyecto que tiene la modesta intención de divertir y divertirnos. Nuestro propósito es el de compartir a quienes nos acompañen un poco de aquello de lo que nos vamos enterando: Escepticismo (de ahí el nombre), ateísmo, pensamiento crítico y sentido común (no necesariamente en ese orden).

Asimismo llevaremos a ustedes programación musical para todos los gustos, así como chistes, chismes, podcasts, material reciclado y todo lo que ayude a que permanezcan con nosotros.

Skeptrónica busca conformarse como un sitio sin censura. Por tal motivo enarbola el llamado Derecho de Ofender, es decir, la libertad de proferir cualquier tipo de expresión, independientemente de si su receptor la considera ofensiva o no, puesto que "no sentirse ofendido no es un "derecho", ni mucho menos. Lo que nos ofende o hace sentirnos insultados es un asunto puramente subjetivo, personal, en el que las leyes no tienen nada qué hacer. Son temas íntimos, y no tienen tampoco por qué normar o limitar el accionar de los demás seres humanos." (Mauricio-José Schwarz). Naturalmente, en nuestra interacción será posible y deseable el derecho de réplica. Ninguna opinión será acallada y todas serán analizadas, absorbidas y, según el caso, asimiladas o desechadas.

Buena parte de los integrantes del proyecto Skeptrónica la componen ateos. En nuestra opinión se verá reflejada esta posición ante las concepciones sobrenaturales en las que no creemos. Aún así son bienvenidos también todos los creyentes religiosos de cualquier tipo de credo que así lo deseen, así como la expresión de sus ideas, aún cuando éstas tengan por objeto evangelizar o hacer proselitismo religioso. Sin embargo, bajo el amparo del derecho de ofender, esas ideas expresadas podrán ser rebatidas sin ningún tipo de consideración. Estamos dispuestos (y gustosos) a analizar y, si es necesario, vapulear cualquier punto de vista dogmático o que consideremos erróneo, así provenga de los mismos ateos.

Nuestras restricciones son muy pocas y (esperamos) comprensibles. A saber:

· Material ilegal.

· Spam, definido como "Los mensajes no solicitados, no deseados o de remitente desconocido, habitualmente de tipo publicitario, enviados en grandes cantidades (incluso masivas) que perjudican de alguna o varias maneras al receptor." (Wikipedia)

Los contenidos generados en este sitio estarán bajo una licencia de Creative Commons. Serán puestos a disposición de quien desee portarlos, utilizarlos o distribuirlos; con la única condición de que no se busque lucrar con ellos.

Dado que no buscamos ninguna clase de lucro con nuestros contenidos, todo el material expuesto será de distribución gratuita, negándonos a recibir contribuciones externas. Lo anterior incluye cualquier cobro de honorarios y cuotas, así como cualquier intento de patrocinio político o empresarial, sin importar la pureza de intención de aquel que busque hacer alguna aportación.



En pocas palabras: Radio por internet. Ya llevamos casi un mes en este asunto y he podido darme cuenta de una gran verdad: Mis participaciones por micrófono apestan y necesito clases. Aún así es muy divertido estar ahí poniendo música.

Si no tienen nada qué hacer pueden sintonizarla. Y si quieren formar parte. no importa si cantan, bailan, escriben, dibujan... o de plano no hacen nada de eso pero quieren entrarle son bienvenidos.

Por lo pronto...

Esto es Skeptrónica.


Poco a poco van juntándose algunos materiales, tanto gráficos, como de audio y de texto. Todas ellas son de libre distribución y pueden descargarlas aquí.

Sean ustedes bienvenidos.

Queda de ustedes:

TORK. Bizcocho de Montecristo. Año 2010 E.C. - 10 E.E.

Tarde

Siempre llego tarde. Y no me refiero a cuestiones de puntualidad ─que eso da para su propia entrada─, sino a que siempre empiezo las cosas ...